Quería aprenderse sus límites y líneas de memoria, por su algún día (la) perdía (la) vista. Para recordar su sonrisa en braile y saber cómo escribir la piel de gallina del hombro al muslo, sin olvidarse jamás de rodear, de abrazar, de besar el ombligo.
"Junto a la fuente en la que un día juré que jamás querría tanto a una mujer..."
2 comentarios:
queria memorizar cada linea de su piel , cada centimetro de ella ...
Nada como ver con el tacto, nada como sentir con las miradas. aunque este alma siga atrapada en este cuerpo donde las libeludas susurran!
^^ Angel!
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