miércoles, 10 de marzo de 2010

Poetry



Desde que me hice poeta no he vuelto a beber agua de la que ni sabe ni huele.
Desde que me hice poeta el blanco o negro son peces en un estanque, que se ahogan.
Y tengo varios soles, y amaneceres nocturnos.
Tengo Warcry, Vetusta, Extremoduro. Tengo libros y héroes.

Desde que me he hecho poeta, cada vez me hago más pequeña.
Y sé que de aquí a unos años volveré a ver películas de princesas, de las que son prometidas con príncipes malvados.
Y sé que de aquí a un tiempo veré películas de terror los viernes por la noche, de esas malas, malísimas; de las que me encantan.

Y es que desde que me he hecho poeta no rindo pleitesía a más rey que el del norte, o los dragones.
Que no aúllo a otro dios que no sea mi luna.
Y no sueño con otra cosa que no sean reflejos del cristal.

Nunca he sabido respirar la nicotina, pero mis palabras se vuelven humo revoloteando entre los labios.

1 comentario:

El Drac dijo...

Qué precioso lo que nos narras pero ojalá sea sólo la ficción de tu talento la que nos regalas, no nos gustaría que te pierdas para siempre en el mundo imaginario, querermos sentirte real, tangible. Oir tu risa de felicidad