domingo, 30 de mayo de 2010

Adiós, Sevilla.


"Eh, Ren, si me muero, ¿te morirías conmigo?"
"Por supuesto"


Y ahora, ¿quién queda que me conozca?
Un poco más sola, de nuevo, que nunca viene mal recordar.

Omae wa Nana ja nai, oboeteru.


Adiós, Sevilla.

1 comentario:

El Drac dijo...

Dios mío!! cada vez que vengo a tu blog me quedo con unas ansias locas de abrazarte muy fuerte