Ese momento en Octubre donde tienes ganas de marcharte. Bueno, no de marcharte, de que te vayan a buscar. De que te digan todas esas cosas que, por tontas, hacen que pueda echarme a llorar y no sentirme mal nunca más. Hasta que tenga un segundo para pensar.
Ganas de esconderse, debajo de un montón de mantas, donde no tenga forma ni color, donde no tenga ojos ni sonrisa. Hasta que me encuentren, si me encuentran.
Que me reclamen, que me den motivos para ser.
Que los encuentren.
5 comentarios:
Yo tambien quiero ser encontrada,
muy hermosa entrada, te dejo un beso grande
Eres una niña que necesita mucho cariño y mimos. Un gran abrazo
Y que si te van a encontrar, sea alguien que merezca encontrarte, sea dicho de paso.
¿Qué tienen los Octubres que siempre son tan hijoputamente melancólicos?
PD: Me acojo a unas cuantas de tus reglas para siempre.
Es lo que tiene Octubre...
se acerca el invierno y no queremos que nos pille sin abrigo, vdd?
besitos desde un lugar cercano =)
Encontrar es seguir...
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