sábado, 20 de diciembre de 2008

Baka...

Fíjate si soy estúpida, si lo somos,
que a mi se me olvida, y tú haces como si no hubiera nada que recordar.
Que tú no lo piensas, y yo lo sé sin pensar.
No tengo fuerza para volver el invierno primavera, ni ser musa y creadora.
No tengo poder para doblegar la translación y rotación de la Tierra a mi voluntad.
Ni volver al gusano mariposa.

Fíjate si soy estúpida, que creí poder ser mejor;
y he acabado llorando en el azul, que no el blanco.
Que en mis planes de futuro, nunca entró la opción C.
Porque me atranqué en el plan B de la emboscada, sin pensar que yo no tenía fuerza, y a ti se te acabaron las promesas.

Si soy tonta, que envuelvo en papel de regalo las cuchillas,
y las abro, una vez al mes, con emoción, creyendo encontrar algo nuevo.
Algo que, lo entiendo, no es mío.
Porque mírarme, estoy derrumbada de nuevo, en el suelo.
Y esta no es forma, y a nadie le gusta esto.

Pero fíjate si soy estúpida que incluso me levanto sola,
sacudo el polvo de mis pestañas, y, si tengo ganas, sonrío y no añado nada más.
Si soy estúpida que no tengo intención de decir nada, porque nada tengo que decir.
Si soy estúpida que me he dado cuenta...

Fíjate, pero no demasiado, no vayas ver lo mismo que yo.
Ten por seguro que no añoraré nada tanto como lo prohibido.

"Ella, mi princesa, mi esperanza, mi amor..."

Ya tengo regalo que pedirle a mi estrella estas navidades.
.

1 comentario:

Ferran Vega dijo...

Levántate, pues.

Podías... y puedes.