Recuerdas que nada es imposible.
No sólo recuerdas, lo crees, que es más importante.
Se te eriza la piel escuchando una canción cualquiera.
Te invade por un instante esa sensación de incomodidad de descubrir que hay gente más guapa, más lista, más buena que tú, que todos. Pero incluso ese sentimiento que te revuelve las sonrisas te gusta, lo sientes. Lo sientes. Lo crees.
Que se aleja la gente.
Pero no tienes miedo, ni sientes ése pánico a las ganas de llorar por estar sola que solías tener.
Es verdad, hace mucho que no lloras, mucho, y no lo echas de menos.
Porque sabes que puedes, que eres, que crees.
Y serás, si quieres serlo, si crees serlo.
Hoy eres feliz y desdichada, como los demás.
La diferencia es que te gusta todo, lo quieres todo.
Si te quedas, si te vas. Si me hablas o te callas.
Si me cuentas a quien amas, a quien odias.
Lo quiero.
Yo no me pongo celosa, me pongo triste.
Yo no me decepciono, me enfado (con todos).
Yo no amo, siento.
Yo no juro eternidades, veo caer las hojas en otoño.
Yo no uso paraguas, invoco a la lluvia.
Yo no reclamo personas, espero, espero, espero.
Y volvemos al inicio de la lista.
Me siento libre, no por ti, ni por el sol de hoy con su lluvia.
No, esto es por mí, por la música, por recordar.
Me siento libre, y no existe nadie en el mundo. Nadie.
4 comentarios:
Pues quizás, en parte, sí sea por mí.
Un beso.
Entiendo que no te guste llorar. Y no sé si me alegro del todo de que haga tiempo que no lo haces, que no lloras. A mi me gusta, me recuerda que en mi estupida incoherencia, hay cosas que me importan demasiado.
No lo justifica, pero sí me lo recuerda.
(L)
yo no juro eternidades, no juro cosas que se las lleva el viento..
Cosas por hacer... menos llorar y entristecer el alma. Aun sola puede ser y/o creer ser feliz =)..
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