Siempre olvido las personas que debían importar(me) -y es que es de una relevancia universal-.
Olvido entender, olvido escuchar.
Siempre pierdo el hilo del mundo y acabo tirando del que no era.
Se deshilacha el tapiz; cable rojo, cable verde.
Destruyo tu humor, tus noches, tus días. Puedo destruirlo todo.
Porque siempre olvido lo que es importante.
Quienes lo son.
Debería dejar de apuñalar a cualquiera que llame a mi casa.
Debería dejar de amordazar a los invitados, niña, o no querrán volver más.
Lo más importante, cuando lloro no sé leerlo. Y guardo recuerdos de cada uno; los mismos que tiraré contra tu ventana.
Debería dejar de creer que las personas son especiales para uno.
Dejar marchar, a los que vinieron, a los que te dieron. Que se vayan, y no les manches la ropa con tus lágrimas, que las abres con la facilidad de un grifo. Sé agradecida coño.
Date cuenta de quién eres, y dónde estás.
No es importante si te duele a ti,
es importante si, por tu culpa, le duele al resto.
Egoísta.
3 comentarios:
vaya,
encontrarte y admirarte
ha sido todo seguido
bya qye pedazo d frase la del final
Grande.
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